
No enjuiciar a Cuauhtémoc, portazo a las mujeres: Germán Martínez
CUERNAVACA, Mor., 12 de julio 2018.- Tras revisar los 33 acuerdos de validación de la elección y asignación de regidurías en cada uno de los municipios en Morelos, es posible afirmar que la población aún no confía lo suficiente en las mujeres para otorgarles el voto.
Los acuerdos relativos a la paridad de género expedidos por el Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (IMPEPAC) obligaron a los partidos políticos a postular hombres y mujeres en las candidaturas para competir en igualdad de circunstancias.
Dichos acuerdos definieron la integración de la paridad horizontal y vertical en las candidaturas durante el pasado proceso electoral, en primer lugar alternando hombres y mujeres en las listas y fórmulas, por ejemplo en el caso de que se postulara un hombre a una alcaldía, la candidata a la sindicatura debía ser mujer, el primer regidor hombre y así sucesivamente. Para atender la paridad horizontal y evitar que a las mujeres se les postulara “para perder”, los partidos debieron postular al mismo número de hombres y mujeres en sus bloques de baja, alta y media votación.
Pese a todas las disposiciones anteriores que se cumplieron en los registros de candidaturas, de las 33 alcaldías únicamente 5 (15.15 % ) serán encabezadas por mujeres.
En el caso de las 153 regidurías disponibles únicamente 42 (27.45 %) serán ocupados por mujeres.
La mayoría de los Cabildos serán integrados mayoritariamente por hombres a excepción de Temixco, Tepancilgo, Mazatepec, Tlalnepantla, Tetecala, Amacuzac, Jonacatepec y Miacatlán.
Uno de los ejemplos más claros en cuanto a la votación para las mujeres es el municipio de Amacuzac, en donde había cinco candidatas a la alcaldía y las personas prefirieron votar por un varón en prisión (Alfonso Miranda Gallegos).
Bajo la lógica en que se integraron las planillas de Ayuntamientos, en que si el candidato a alcalde era hombre, también la lista de regidores la encabezaba un varón y viceversa en caso de que la candidata fuera mujer, permite inferir que la cantidad de hombres que llegaron a las regidurías fue porque las personas votaron más por los hombres independientemente del partidos que los postuló o las zonas del estado en que compitieron.