Demandan al INE por no cubrir con gastos médicos

CUERNAVACA, Mor., 06 de junio de 2016.- Eder Geovanni Hernández Aranda, ex funcionario de la casilla 454 de la colonia Tejalpa del municipio de Jiutepec, presentó esta mañana una demanda en contra del Instituto Nacional Electoral (INE) por no hacerse responsable de los gastos médicos luego de ser victima de un ataque durante las votaciones del 2015.

Como es de recordar, en las pasadas elecciones del 2015 -en las que se eligieron a los 33 alcaldes, así como a los diputados locales y federales- en la casilla 454 se presentó un acto de violencia, en donde un joven no identificado rocío gasolina y prendió fuego, resultando Eder Geovanni Hernández con quemaduras en partes de su brazo, además de otras tres personas que ahí se encontraban como observadores.

Por lo anterior, Hernández Aranda, explicó que a partir de ese día tuvo que ser llevado al hospital en donde estuvo internado por un mes y otro mes más permaneció en su casa bajo cuidados especiales para que no se infectara su brazo.

Dijo que al día siguiente de las elecciones, el delegado del INE en Morelos, Dagoberto Santos Trigo, anunció en una rueda de prensa que la institución se haría responsable de los gastos médicos, sin embargo, dos meses después señalaban que ellos no tenían la responsabilidad de correr con esos gastos.

“Dos meses ofrecieron otra rueda de prensa diciendo que ellos no eran responsables de los actos y que no iban a cubrir nada, y no he recibido ningún aporte por parte de ellos, lo único que recibí fue por parte de los vocales”, explicó.

Agregó que ese apoyo económico que recibió de ellos, fue solo para cubrir los gastos del tiempo que permaneció en el hospital, ya que aseguró que han hecho más gastos porque han viajado a la Ciudad de México para su rehabilitación, además de que en el tiempo que estuvo internado sus padres ni el pudieron trabajar para tener un ingreso.

Por último, lamentó que a pesar de que ya ha pasado casi un año, la Fiscalía General del Estado de Morelos, no ha podido detener al responsable de esos hechos violentos a pesar de que en el lugar se contaban con cámaras de vigilancia.