Tampoco la Iglesia ha escapado del crimen: presbítero de Cuautla

CUAUTLA, Mor., 27 de diciembre de 2014.- Solo el amor a Dios, la unión familiar y el ejemplo de la vida de Jesucristo serán los factores que nos ayuden a salir de la crisis que enfrenta nuestra sociedad llena de violencia e inseguridad que ejemplifican nuestra frágil condición humana, afirmó el presbítero Jesús Longar Estrada.

El párroco de la Iglesia de Santiago Apóstol de la ciudad de Cuautla, señaló que la Iglesia tampoco ha escapado de la delincuencia, por lo que el amor debe de ser la raíz y el fundamento de nuestra vida, señaló el prelado al reflexionar sobre las miles de familias que celebran el nacimiento de Jesús, fecha en la cual se logra la unión familiar en la festividad más importante del cristianismo.

“No puedo dejar de referirme a los hogares, a la familia que es la base y fundamento de nuestra comunidad, todos sabemos lo importante que es el hogar para la vida de una familia, para el desarrollo armónico de la persona, un hogar bien constituido es capaz de ser un espacio de crecimiento personal, en donde se pueden sortear todo tipo de problemáticas.

“Para nosotros,en México y Morelos, la más compleja es la violencia, la pobreza, la injusticia y la corrupción”, recalcó.

Añadió que cuando el corazón está habitado por alguien que nos ama incondicionalmente nos sentimos realmente contentos, dignificados y fortalecidos, “si Cristo habita en él, nuestro corazón será luminoso, limpio, estará lleno de alegría y de amor auténtico; para esto es necesario abrir la puerta, y esta puerta es la fe, acoger a Cristo en la fe, dejarlo entrar en nuestra vida, fiarnos y confiarnos a Él, la fe es decidirse a estar con el Señor para vivir con Él”.

Asimismo, el padre Longar, afirmó que es que el amor la raíz y el fundamento de nuestra vida, y “la Navidad es la celebración de la venida al mundo del Hijo de Dios, que ha entrado en la fragilidad de lo humano para mostrarnos el amor de Dios y hacer posible que nosotros podamos construir nuestra existencia sobre ese cimiento, porque si la raíz es el amor, todo lo que hagamos será bueno; cuando la raíz de la vida es el egoísmo, el afán de lucro, el dominio del otro, el resultado es desastroso, devastador”.