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Exalcalde de Cuernavaca sale de prisión… para irse a arraigo domiciliario
CUERNAVACA, Mor. 16 de febrero de 2014.- “La ley de Dios, no es la misma ley de los seres humanos, porque los humanos las modificamos a nuestros antojo y las hacemos injustas en mucha ocasiones, haciendo que gente inocente pague y los culpable queden libres, por eso hay que revisar bien las leyes porque no por ser leyes son justas”, dijo monseñor Ramón Castro Castro, obispo de Cuernavaca, durante la homilía de hoy, en la cual exhortó a los morelenses a poner atención en lo que se aplica como ley y si es necesario cumplir con ellas pero después haciendo lo correcto para los demás.
Castro Castro expresó que se vive actualmente en un mundo en el cual la pérdida de valores y la descomposición social ha provocado una serie de leyes malentendidas que no hacen justicia y citó un ejemplo a sus feligreses:
“Esto pasó realmente, en Estados Unidos llevaron a la cárcel a una mujer porque se había robado un pan, y ella explicó que su hija y su marido se habían muerto, que sus nietos estaban enfermos y no tenía para darles de comer y por eso ella había tenido que robar un pan, para darle de comer a sus nietos, entonces el juez le dijo que le creía, pero que tenía que seguir la ley porque el panadero quería justicia, entonces le dio dos opciones: pagar 10 dólares de multa o pasar 45 días en la cárcel, el juez puso 10 dólares, discretamente en su sombrero y se los dio a la mujer, con eso ella entendió que la multa era pagada, entonces el juez volteó y dijo ‘cada uno de los trabajamos y servimos al gobierno en esta oficina, vamos a donar 50 centavos de dólar por permitir que una mujer anciana sea juzgada por robar un pan para que sus nietos coman, por hacer que vivan en una ciudad donde no se le puede garantizar justicia ni alimento a sus ciudadanos pobres’, se juntaron más de 47 dólares y fueron entregados a la mujer”, relató monseñor Castro.
Con esto, el obispo de Cuernavaca intento hacer llegar el mensaje a la feligresía y que ésta pusiera atención y diferenciara lo que es ley de lo que es justo, por eso los exhortó a hacer lo justo, aunque no fuera la ley, pero siempre cumplir con ésta.