En conferencia de prensa, en la víspera del día Mundial de la Fertilidad, que se conmemora el 4 de junio, los ginecobstetras José Enrique Islas Varela y Abraham Martínez Ruiz, detallaron que a nivel mundial, entre 10 y 15 por ciento de las parejas sufre ese problema.
El director del Instituto Especializado en Infertilidad y Medicina Reproductiva (Insemer) Enrique Islas, detalló que el problema es multifactorial, puede tener origen en cuestiones genéticas del hombre o de la mujer, estrés, o incluso ambientales.
Agregó que 40 por ciento de los casos tienen origen en la pareja masculina, otra cifra igual en la mujer, y en 20 por ciento de los casos el diagnóstico es impreciso, pues se desconoce a qué se debe.
El uso de anticonceptivos sin supervisión puede provocar que muchas mujeres no se percaten de que padecen ovario poliquístico y que en su deseo de retrasar su embarazo por diversas circunstancias, entre ellas el desarrollo profesional, agraven su condición y posteriormente no logren concebir.
El especialista, miembro de la Asociación Americana de Infertilidad detalló que en general las parejas que sufren ese problema tardan de tres a seis años en acudir al médico, en muchas ocasiones por falta de información o de dinero, pues consideran que los tratamientos de reproducción asistida son muy caros.
Martínez Ruiz expuso que la infertilidad se diagnostica luego de 12 meses de intentar un embarazo de manera constante sin tener éxito.
En el caso de las parejas mayores de 35 años, el plazo para diagnosticar infertilidad es de seis meses, de acuerdo con la edad de la mujer, ya que ésta afecta la calidad de los óvulos y su capacidad reproductiva, además, al llegar a esa edad las posibilidades de embarazo se reducen 50 por ciento y cada año nueve por ciento más.
El experto integrante de la Federación Mexicana de Endoscopia Ginecológica agregó que el reloj biológico de la mujer alcanza su punto más alto entre los 20 y los 27 años de edad, cuando las posibilidades de concebir son de casi 100 por ciento, a partir de los 30 años de edad de la fertilidad comienza a disminuir.
Resaltó que en la actualidad, y a 30 años de que en México nació el primer bebé mediante una técnica de reproducción asistida, a través de la fecundación in vitro, la ciencia ha avanzado a grandes pasos.
Hay diferentes técnicas, que dependen de las circunstancias y de los problemas particulares de la pareja, que van desde los coitos programados, la inseminación artificial y la fecundación in vitro o trasferencia de embriones, explicó.
El especialista refirió en el instituto se aplican las tres técnicas, lo que ha permitido lograr mil 500 embarazos exitoso, 10 por ciento de los cuales han sido en pareja del mismo sexo.
Los costos dependen del tratamiento de baja o alta complejidad, y van de siete mil a 20 mil pesos en el primer caso y 65 a 91 mil pesos cuando resulta más complejo.
Con información de Excélsior.
