Exigen justicia familiares de víctimas en Morelos

CUERNAVACA, Mor. 9 de diciembre de 2013.- Familiares de víctimas de asesinato y fabricación de delitos en Morelos exigieron respeto a sus derechos y justicia por parte de las autoridades estatales.
En el marco del 65 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la Comisión Independiente de los Derechos Humanos de Morelos, hizo un llamado para que se investiguen los casos del asesinato de Petra Benítez Barrios y la detención arbitraria y tortura de Alejandro Ávila Arteaga.
Los padres de Ávila Arteaga relataron que el 3 de septiembre de 2012 su hijo, herrero de oficio, llegó a su trabajo en una casa ubicada en la colonia Prohogar, en el municipio de Emiliano Zapata, y que una vez ahí, tres personas que estaban adentro lo golpearon a él y al dueño de la casa a quienes les dejaron en un saco a una persona que estaba secuestrada, minutos después llegó la Policía Federal y detuvieron a Alejandro Ávila y su acompañanante.
“A mi hijo lo torturaron para que se declarara culpable de varios delitos. Mi hijo es inocente de todo lo que le imputan, pedimos que se investigue lo que realmente pasó porque a mi hijo le están fabricando delitos que él no cometió. Como familia nos han cambiado mucho”, dijo Estela Arteaga, mamá de Alejandro Ávila.
Tras ser detenido el morelense fue llevado a la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada, donde fue torturado y de ahí trasladado al penal de Puente Grande.
La familia interpuso una queja en la Comisión Nacional de Derechos Humanos, sin que hasta el momento hayan recibo una respuesta favorable.
“No estamos viviendo tranquilos, mi hijo está afectado psicológicamente por esta situación. No hemos encontrado justicia, las investigaciones no se han hecho, el proceso ha sido muy largo, no hemos visto nada claro”, agregó la señora Estela.
Por su parte, Joaquina Tequeo Benítez, denunció que desde hace dos años que su mamá, la señora Petra Benítez, fue asesinada en su hogar junto con uno de sus hijos de 22 años y su nieto, de 4, las autoridades no han dado ningún avance en la investigación, por lo que urgió a la procuraduría estatal a resolver el caso que lleva parado 24 meses.