
Lamenta Gobierno de Morelos fallecimiento del artista Rafael Cauduro
CUERNAVACA, Mor., 30 de septiembre de 2015.- Nacido el décimo día del décimo mes de 1962, Francisco Álvarez es hijo del Maestro del arte y periodista Cristóbal Álvarez, autor de entre otras muchas obras de los murales de la Plaza de toros monumental de San Luis Potosí, autor también, junto con el maestro Humberto Peraza, de los relieves de la plaza de toros de Ciudad Juárez México, del Cristo de los Toreros de la capilla de la Plaza Monumental de Zacate.
Platicamos con el maestro Álvarez Cuando contemplamos sus cuadros de toros no solo nos enfrentamos a la materialización de una obra plástica sino que nos adentramos en el conocimiento profundo de la lidia alejándolo del “folclore” y acercándolo al lugar más humano que tiene la fiesta.
Las obras del maestro Avarez desprenden un realismo asombroso, y un tanto inquietante. Sus trazos retratan a los toros con la eficacia de una cámara fotográfica y el lirismo de una poesía.
La nobleza del poderoso animal queda plasmada en cada uno de sus lienzos, al igual que la soledad del torero cobra sentido. Todo acompañado por una ingente multitud desenfocada, en la que las caras pierden su sentido humano, convertida, así en un común de espectadores deseosos de disfrutar de la maravilla o de ser testigos de la obra de arte.
Afirmo sentirse contento y lleno expectación por la invitación oficial que recibío de parte de la Comunidad de Madrid , para el próximo día 2 de octubre a la presentación del libro: Silverio nos Une…¡Olé! , obra del Maestro Bardo de la Taurina en la Plaza De Las Ventas de Madrid ,agradezco la invitación para presentar en España obras de mi creación que aparecen en este libro. Un sueño hecho realidad.
La historia del coso, la gran oferta gastronómica y los carteles de toreros, hacen que Madrid sea un destino para el aficionado. Una feria corta pero llena de alicientes para no faltar. Y además el clima va a acompañar. Magníficas tardes de otoño para disfrutar del toreo.
Una de las últimas ferias del año con la seriedad de una plaza de primera y un público entendido y exigente hacen que la Feria Taurina de Otoño en Madrid promete. Ha dedicado su vida artística a la representación del mundo taurino. Los dos contendientes, y todo el utillaje que rodea al desempeño del oficio son sus temas predilectos. La plaza de toros y los campos abiertos representan distintas facetas de la libertad y el cautiverio, no sólo para el torero también para quien porta el traje de luces y vive el arte único de la fiesta brava.