Entre rechiflas y amenazas de protestas, inauguran estadio Coruco Díaz

ZACATEPEC, MOR., 27 de agosto de  2014.- Tras varios meses de retraso en la obra, la cual aún no está concluida, finalmente esta noche fue inaugurado el estadio de fútbol Agustín Coruco Díaz por el gobernador del estado, Graco Ramírez, quien estuvo acompañado por Decio de María, presidente de la Federación Mexicana del Fútbol, así como de personajes que forman parte de la historia de los cañeros del Zacatepec, quienes presenciaron el juego entre los morelenses y las Chivas del Guadalajara, que sacó los tres puntos del estadio.

Minutos antes de las 21:00 horas, el Ramírez Abreu dio la patada inaugural, hecho por el que recibió tremenda rechifla.

Previo a esto, se entregaron reconocimientos a personajes emblemáticos de este equipo de los Cañeros del Zacatepec Siglo XXI, entre ellos, la viuda de Agustín Coruco Díaz, Consuelo de Díaz.

También destacó la presencia del dueño de Chivas, Jorge Vergara, quien al acceder al palco fue abucheado por los asistentes.

Horas antes de iniciar el partido, la afición que se quedó sin boleto recurría a los revendedores, algunos asistentes comentaron que había boletos desde 600 y 800 pesos, otros dijeron que algunos aficionados habían decidido no asistir por diferentes razones y vendieron sus boletos a un precio menor del que lo adquirieron.

Además, se esperaban protestas de transportistas de la zona sur, que se oponen a la instalación del Morebus, quienes por la mañana habían montado operativos de vigilancia para impedir que este nuevo transporte, entrara y se instalara; sin embargo, la amenaza no se cumplió, por lo que se mantuvieron a la expectativa. También se había anunciado la manifestación de maestros del SNTE, hecho que tampoco ocurrió.

La afición estaba ansiosa por ingresar al estadio, y desde afuera del recinto se escuchaban las rechiflas, gritos y hasta ‘mentadas’, pues exigían acceso inmediato. Cuando por fin abrieron las puertas, la mayoría de los fanáticos corrían para escoger el mejor lugar.

El estadio se fue pintando de asistentes poco a poco hasta lucir casi un lleno total.

Durante el encuentro, la barra cañera entonó su repertorio de cánticos y pese a que el resultado no fue favorable, los fieles nunca dejaron de tocar, cantar y apoyar a su equipo.

Al término del primer tiempo, se observó al gobernador del estado tomándose selfies con gente allegada.

En ese momento, la alegría y el júbilo hicieron vibrar el renovado Coruco Díaz con la participación de un centenar de Chinelos en el espectáculo de medio tiempo, acompañados por juegos pirotécnicos, que hicieron bailar a los asistentes, quienes aún esperanzados no dejaron de apoyar al equipo de casa.

El despliegue de elementos policiacos, dentro y fuera del recinto se hizo presente en todo momento.

El saldo del evento, hasta el momento, fue blanco, pues no se reportaron disturbios al término del partido.