![](https://morelos.quadratin.com.mx/www/wp-content/uploads/2025/02/d4ab3274-f933-46ee-b85d-987614fe4af0-107x70.jpeg)
Pagará Ayuntamiento de Jiutepec deuda por 11 mdp al SAT
Tlaltizapán, Mor. 13/noviembre/13.- De acuerdo a una nota El Sol de Cuernavaca, a punto de ser linchados y quemados, estuvieron tres ladrones de cobre y cable, al ser detenidos in fraganti por vecino de la comunidad de San Rafael Zaragoza, los que finalmente fueron rescatados tras ríspida negociación y el arribo de corporaciones y elementos del Ejército al centro de esta localidad, del municipio de Tlaltizapán. Los sujetos que fueron descubiertos robando cable de Teléfonos de México iban a ser quemados en pleno centro de San Rafael Zaragoza, pero fueron rescatados por las autoridades luego de dialogar con los vecinos y convencerlos de no “hacer justicia por su propia mano”.
Fue alrededor de las 6.00 de la mañana, cuando dos de los detenidos fueron sorprendidos por los vecinos durmiendo en un limonar con su botín, que consistía en tres bultos de cable de Teléfono, por lo que llamaron a más vecinos para detenerlos, justo cuando en esos momentos llegaba por ellos un taxista de la capital, era su cómplice, por lo que fue detenido en el lugar. En pleno centro de la población, fueron atados a un poste de madera en la cancha de Básquetbol, vendados de los ojos, ahí, la gente enardecida pedía que fueran quemados, pues dijeron que son integrantes de una banda que opera en esta región.
Los detenidos responden a los nombres de Juan Carlos Cervantes, de 19 años de edad, vecino de Villa de Ayala, Tomas Nava Román, de 27 años de edad, vecino de Yautepec y Moisés Nava, de 19 años de edad, vecino de Villa de Ayala. Asimismo, en la calle frente al centro de Salud, de San Rafael Zaragoza, se encontraba un taxi de Cuernavaca, con placas de circulación 10-03-LTD,que era tripulado por Juan Carlos Cervantes.
Alrededor de las 12:00 horas arribaron elementos del Ejército a apoyar a la Policía Municipal, Acreditable y al Mando Único y por parte del municipio arribó Juan Carlos Ocampo, asesor del Ayuntamiento, quien llegó para conciliar con los vecinos y desistieran de sus intenciones de quemarlos vivos. Fue alrededor de las 12.30 horas, cuando arribó la agente del Ministerio Público, Anaí Vargas Ovando, quien dialogó con una comisión de vecinos ahí mismo para convencerlos de entregarlos a las autoridades, y quien negoció su liberación comprometiéndose a hacer valer la ley y la justicia, poniéndose a cargo del Ministerio Público para su consignación correspondiente.
Los vecinos que exigieron a los medios de comunicación no publicar las gráficas de la gente, ante la amenazas que los detenidos hicieron, pidieron a los primeros reporteros que llegaron que borraran sus gráficas, sin embrago, al final externaron su confianza en entregar a los cautivos a las fuerzas castrenses, sin embargo, los de las negociaciones fueron representantes municipales y ministeriales.