
Reconoce juzgado federal a Juan Gabriel Vargas como presidente del TSJ
CIUDAD DE MÉXICO,. 07 de septiembre 2018.- Hace dos semanas, en un restaurante de la colonia Roma en la Ciudad de México, se reunieron a comer el gobernador electo Cuauhtémoc Blanco, el Presidente del PES Hugo Erick Flores, el senador con licencia Rabindranath Salazar, José Manuel Sanz y el diputado por Morena, Javier García, el gato.
Inicialmente el encuentro fue álgido, rispido. Incluso hubo algunos reproches y acusaciones.
Pero la habilidad de Hugo Erick Flores fue notoria.
Paulatinamente, los ánimos se calmaron para dar paso a un diálogo si no cordial, tranquilo.
Acordaron mantener la comunicación, en lo posible tejer acuerdos pensando siempre en el beneficio de Morelos pero sobre todo recordando que llegaron al poder al amparo y cobijo de la coalición Juntos Haremos Historia que encabezó Andrés Manuel López Obrador.
Hay que señalar que hubo al final cordialidad. No estuvo el senador Miguel Lucia, con quien el gobernador electo tuvo sus principales diferencias.
Lo más importante fue que se sembró la semilla del diálogo y la conciliación. Eso sobre la marcha puede cambiar la configuración política actual y dejar de enviar señales negativas a la sociedad.
Por cierto, el cumplimiento de los compromisos asumidos por el gobierno entrante, lo mismo con sus aliados iniciales como con los de última hora, pueden ser claves para que siga la buena racha de Blanco y equipo.