
Gestión de desastres naturales
No son muchos en el país, porque no es sencilla su conformación, al ser su figura jurídica la de asociaciones civiles y, por lo tanto, ostentar una auténtica autonomía financiera que tampoco es fácil de sostener. Lo que resulta indudable en su contribución a la investigación regional y el fortalecimiento del humanismo y la academia.
Nos referimos a instituciones que en algunas entidades del país, se han forjado bajo el esquema del primero de ellos, el Colegio de México; creado a partir de lo que fue La Casa de España en México que funcionó entre 1938-1940, como refugio de intelectuales españoles republicanos. Después se convirtió en el renovador de la cultura mexicana y el desarrollo científico del país.
Por citar unos ejemplos, está El Colegio de Michoacán, creado por el genio creativo de Luis González y González y que inició en enero de 1979, consagrado a las ciencias sociales y las humanidades. El Colegio se fundó en Zamora, ciudad del noroeste de Michoacán, respondiendo “a la necesidad de crear focos de desarrollo académico en provincia”.
En agosto de 1982 arrancó El Colegio de la Frontera, el cual imparte a la fecha 7 maestrías y 3 doctorados, programas que forman parte del Padrón Nacional de Posgrados de Calidad del Conacyt en los niveles más altos. A través de la Unidad de Educación Continua se imparten de forma virtual una maestría y dos especialidades, otorga becas a estudiantes y ofrece instalaciones con equipamiento favorable al estudio, la investigación y el trabajo docente.
El Colegio de San Luis se fundó en enero de 1997, es un centro de investigación que desarrolla programas y proyectos destinados a “la construcción de nuevos conocimientos para el entendimiento de la vida social”; ofrece programas docentes de posgrado y licenciatura para formación de investigadores y profesores en el campo de las Ciencias Sociales y las Humanidades.
Al catálogo de Colegios en el país, se sumó en julio de este año, el Colegio de Morelos, cuyo antecedente fue el Centro de Investigación en Docencia y Humanidades (CIDHEM), fundado en 1988 por el filósofo y ex,director de la Facultad de Filosofía de la UNAM, Ricardo Guerra Tejada, quién lo dirigió hasta su fallecimiento en 2007. Después de casi nueve años de administraciones erráticas, el Centro fue extinguido por el gobierno de Graco Ramírez en diciembre de 2015.
Como rector de El Colegio de Morelos fue designado, por la Junta de Gobierno del mismo, Luís Tamayo Pérez, quien fungió como director académico del extinto CIDHEM. Tamayo Pérez es Maestro y Doctor en Filosofía, postdoctorado en la Universidad Albert-Ludwing de Freiburg, Alemania y psicoanalista de L’Ecole Lacanienne de Psychalyse.
El ColMor inició con Maestría y Doctorado en Estudios Multiculturales, Estudios de la Complejidad, Maestrías en Gobernanza, Educación, Literatura y Ciencias Políticas, además de la doble Maestría en Ciencia Política y Sociales (México) y Master Administartion et Management Public (Francia).
Al igual que sus similares arriba citados, El Colegio de Morelos sin duda contribuye a aquel espíritu que anima a la formación de estas instituciones del fortalecimiento de la actividad científica y humanista en todo el país y, asunto vital, a hacerlo desde las entidades y regiones, de manera que se atienda la visión multicultural y diversidad de identidades que existen y conviven en los “diferentes Méxicos” que forman la nación.