Alertan sobre contagio de piojos en las vacaciones

MÉXICO, 28 de julio de 2014.- Mientras la Secretaría de Salud (Sedesa) del DF niega que exista un brote de epidemia de piojos, especialistas aseguran lo contrario y advierten sobre un incremento de hasta 20% de estos parásitos ahora que inician los cursos de verano.

La Sedesa refiere que sólo hay pequeños brotes -mil 152 casos confirmados en lo que va del año- y que la cifra es consistente con años anteriores.

Ingrid Sánchez Armas, experta en el combate y tratamiento de piojos y liendres, advierte que los cursos de verano y campamentos representan un foco de contagio que se verá reflejado al inicio del ciclo escolar, por la falta de atención de casi 60% de madres que desconocen la presencia de estos insectos en el cabello de sus hijos.

Consideró que el tema sí representa un problema de salud pública y que es necesario contar con mecanismos preventivos.

Después de la gripe, los piojos se consideran el segundo contagio más común en las escuelas.

La especialista detalla que ocho de cada 10 contagios se dan en las instituciones escolares.

Tan sólo en México, incluido el Distrito Federal, al menos 7.5 millones de personas tienen piojos en este momento.

Actualmente, considera la especialista que además de los niños los adolescentes también pueden padecer el contagio de piojos, porque nuevas costumbres como el tomarse selfies y juntar las cabezas los exponen a ello.

Al respecto, la Sedesa declaró que el número de casos que tiene detectados se han dado en 54 escuelas oficiales y tres privadas.

Los piojos son parásitos sin alas que viven y se alimentan de sangre humana. Logran sobrevivir hasta 48 horas fuera de la cabeza.

El invierno es la época con mayores contagios, debido a la convivencia y el préstamo de prendas de ropa como gorras, chamarras, guantes, bufandas, etcétera.

De acuerdo con la experta, 90% de los contagios se da entre niñas y mujeres, aunque cuando ataca a los hombres se desarrolla más rápido.

Los piojos no son un problema de higiene, sino un padecimiento costoso. Las familias llegan a gastar hasta cuatro mil pesos en productos especiales por la falta de información, dice Sánchez Armas.

“He tenido ocho casos en donde los niños llegan muy dañados de su cuero cabelludo, hasta con pus, porque los padres con tal de quitarle los piojos les compraron champú con insecticida y no pudieron combatir a estos insectos”, dice.

La mejor forma de combatirlos, de acuerdo con la experta, es a través de lendreras, peines especiales para combatir estos parásitos.